- Novel-Eng
- Romance
- CEO & Rich
- Billionaire
- Marriage & Family
- Love
- Sweet Love
- Revenge
- Werewolf
- Family
- Marriage
- Drama
- Alpha
- Action
- Adult
- Adventure
- Comedy
- Drama
- Ecchi
- Fantasy
- Gender Bender
- Harem
- Historical
- Horror
- Josei
- Game
- Martial Arts
- Mature
- Mecha
- Mystery
- Psychological
- Romance
- School Life
- Sci-fi
- Seinen
- Shoujo
- Shounen Ai
- Shounen
- Slice of Life
- Smut
- Sports
- Supernatural
- Tragedy
- Wuxia
- Xianxia
- Xuanhuan
- Yaoi
- Military
- Two-dimensional
- Urban Life
- Yuri
Capitulo 615
ASF Pakistan you… posted a video
Antonio sentía la garganta seca, sorprendido por la reacción que ella provocaba en él.
Su nuez de Adán se movía mientras hablaba con una voz que, sin darse cuenta, se había
tornado ronca, “¡Sueltame!”
“¡No te voy a soltar!” Marisol sacudia la cabeza, las lágrimas empañaban sus ojos
mientras se restregaba contra él, su voz entrecortada, “Rodrigo, ¿qué he hecho mal? ¿Por
qué me haces esto? ¿No quedamos en casamos cuando te trasladasen de vuelta al pals?
Primero compraríamos una casita, y después, con los años, cambiaríamos a una más
grande…”
La expresión facial de Antonio cambiada cada vez más agarrando sus manos, “¡Mira bien,
no soy quien dices!”
Pero Marisol parecia no escucharlo, seguía murmurando, “¿Es por eso que no me deseas?
¿Las tentaciones del extranjero son muchas y no pudiste resistirte? Yo también puedo
ofrecerte eso, ¿quieres? ¿Te lo doy ahora mismo?”
Al terminar, ya estaba intentando desabotonar su camisa de forma desesperada.
El desequilibrio causado por uno sentado y el otro de pie hizo que Antonio perdiera la
estabilidad y cayera sobre ella. Apenas había apoyado sus brazos cuando sintió sus labios
sobre los suyos, torpemente tratando de entreabrir su boca.
El sabor que le hacia revivir memorias estaba atacando de nuevo, su sangre parecia hervir
en un instante.
Si ella seguia provocándolo asi, sin ningún tipo de freno, temia no poder contenerse.
A diferencia de otras mujeres llenas de artimañas, ninguna le despertaba el deseo tan
fácilmente como ella.
Sabía muy bien lo que queria ahora.
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇtLos músculos de los brazos de Antonio se tensaron, y con un gesto rápido levantó su
barbilla, su voz contenida, “¿Realmente sabes quién soy?
Marisol, dolorida por su fuerza, fruncia el ceño con las pestañas temblorosas, y tras
reconocerlo, exclamó, “Rufián, descarado, el que arruino mi cámara, desgraciado.
Tras ser insultado en ráfaga, la cara de Antonio se oscureció,
No estaba seguro si ella estaba lúcida o confundida, pero después de dos segundos, volvió
a sollozar, y sus manos ya habian desgarrado completamente su camisa.
Los ojos de Antonio, llenos de pasión, parecían desatar una tormenta, y su rostro se torcia
ligeramente como tratando de suprimir algo. Cuando el sonido del cinturón resonó,
exploto y se abrió por completo, “Esto es lo que querias!”
Las palabras que ella habia esparcido sobre él, en ese momento, también lo habian
provocado a querer demostrar
quién era.
Al mismo tiempo, despertaban en él un instinto primitivo de conquista.
“¡Ay, duele!”
Al verla encogerse de dolor, Antonio la miró confundido.
El sudor le caia por la frente, pero no podia detenerse, el temblor de su alma solo le urgía
a obtener más.
Una ciudad desconocida, una noche extraña.
Era una pasión que ni Marisol ni su novio Rodrigo de cinco años habían experimentado.
A la mañana siguiente, Marisol despertó y al abrir los ojos sintió que todo giraba, sus
miembros parecian no responderie.
Dolor, dolor, dolor….
Esa fue su primera sensación,
Todo su cuerpo se sentía como si hubiese sido aplastado por ruedas, cualquier movimiento
le provocaba un dolor agudo. Al girar, su mano tocó un pecho cálido, y sintió un escalofrio.
12:59
Con la conciencia agudizada, Marisol miró al hombre a su lado. Aquellos ojos llenos de
pasión estaban cerrados, marcando aún más los profundos rasgos de su rostro.
¡Caray!
¿Qué había pasado?
Levantó la manta y al ver que ambos estaban desnudos, y el olor inusual en la habitación,
junto con los montones de papel higiénico en el suelo, su mirada se dirigió hacia el pie de
la cama donde había una mancha.
Mirándolo incrédula, los recuerdos desordenados de la noche anterior empezaron a
emerger.
“¿Realmente sabes quien soy?”
“¡Rufián, descarado, el que arruinó mi cámara, desgraciado…!”
*¡Esto es lo que querías!”
Marisol se sintió un poco mareada, y por poco se desmaya.
Su viaje a Cartagena habia sido una auténtica pesadilla para Marisol. No solo había
fracasado en su entrevista y roto su cámara, sino que también habia descubierto la
infidelidad de su novio de cinco años y para colmo, había terminado perdiendo su
virginidad con un imbécil….
Marisol miró al cielo, preguntándose qué había hecho para merecer tanta mala suerte.
Con movimientos cuidadosos, se deslizó fuera de la cama, recogió su ropa dispersa por el
suelo y se la puso, maldiciendo por lo bajo con cada prenda que se ponia. Finalmente,
miró al hombre que aún dormia plácidamente en la cama y se contuvo por poco de
transformar su rostro en algo irreconocible.
Ella habia sido la perjudicada, mientras que él habia disfrutado de la noche.
Al ver la billetera del hombre en la alfombra, la abrió apresuradamente y notó que tenia
efectivo y varias tarjetas y documentos. Con los dientes apretados, Marisol se metió al
baño y poco después se escuchó el sonido del inodoro. Salió de la habitación caminando
torpemente, como un pinguino.
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏmParecia que la ciudad de Cartagena solo traia desgracias, asi que decidió que era hora de
regresar a su hogar en Costal de Rosa.
Al volver al hostal donde se estaba quedando, Marisol se detuvo al ver una figura esbelta
frente a la puerta de su habitación. Era Rodrigo, que lucía tan guapo como en sus
recuerdos, aunque su habitual sonrisa estaba reemplazada por un gesto sombrio.
Su reacción fue mucho más serena que en el pasado.
Aloir sus pasos, Rodrigo se giró, “Marisol, ¿dónde estabas? El dueño del hostal dijo que no
volviste en toda la noche.”
“¿Que te importa?” La mirada de Mansol hacia él era más que fria.
Después de haberlo pillado en la cama con otra mujer la noche anterior, y haber sido
encerrada fuera en el pasillo sin que él mostrara preocupación alguna, ahora venia con
aires de preocupación preguntando por su paradero.
“Marisol, lo siento, dijo Rodrigo, bajando la mirada.
Marisol sonrió con desprecio, “Eso ya me lo dijiste anoche, cuando te pille siendo infiel.”
No todas las disculpas merecen un perdón
No era ninguna santa capaz de olvidar las heridas de su corazón tan fácilmente. Su
relación de cinco años habia sido
una farsa.
La mención de “te pillé” hizo que la expresión de Rodrigo se tensara, con una mezcla de
vergüenza y malestar
Marisol no tenia ganas de discutir. Sacó su tarjeta y abrió la puerta de la habitación. Su
equipaje aún estaba sin deshacer. Al salir con su maleta, Rodrigo la agarró del brazo, su
rostro mostrando una mezcla de complicación y conflicto.
“Marisol, lo siento, no debi ocultarte todas estas cosas, yo…
No alcanzó a terminar su frase cuando se escucharon unos tacones acercándose y una voz
femenina dijo, “Amor, ¿no habías dicho que serían solo cinco minutos? ¡Ya pasaron treinta
segundos!”