Dulce Disparo al Jefe Cachorro Enamorado

Capitulo 765 Marisol casi no respiraba, “;Hola?” A través del teléfono, se podia escuchar vagamente los pasos de Antonio, y de paso las enfermeras lo saludaban con respeto, seguramente acababa de terminar de atender a un paciente y estaba saliendo de la habitacién.

“Acabo de verte y tu cara estaba tan palida como un fantasma, ;segura que es Violeta la que esta enferma y no ta?” Siempre era asi, aunque a menudo parecia despreocupado y cinico, se fijaba en muchos detalles y tenia un corazén atento...

“iNo!” Marisol lo negé rotundamente.

Quizas fue por la brevedad de su respuesta que la voz de Antose volvié un poco mas grave, “jYa entiendo!” Después de eso, hubo un silencio.

Ninguno de los dos volvié a hablar. Marisol no pudo resistirse mas y le pregunto con labios apretados, “Antonio, itienes... algo més que decirme?” Después de un par de segundos de silencio, de repente colgé la llamada.

Marisol miré su teléfono, suspird aliviada y al guardar su mévil se cuenta de que la palma de su mano estaba empapada en sudor.

De hecho, en el momento en que el médico confirmé su embarazo, una mezcla de emociones broté de su pecho: panico y asombro, pero sabia que lo primero que sinti6 fue alegria.

Otros quizés nunca entenderian lo que se siente tener una pequefa vida creciendo dentro de uno, era su hijo.

Marisol acariciaba su vientre plano, recordando las palabras del médico de que solo era una forma preliminar en esta etapa. En seis semanas mas, se convertiria en un feto completamente formado, su higado comenzaria a producir bilis, sus rifiones a secretar orina en la vejiga y sus dedos podrian apretarse. Pronto. incluso podria escuchar el latido del corazon...

Solo de pensarlo, no podia evitar sentirse emocionada.

Guardé el analisis en su bolsillo y se levanté lentamente de la silla.

Aunque la brisa de primavera era calida, estar fuera por mucho tiempo también podia causarle enfermedades.

Después de todo....

Ya no estaba sola. [x] Durante el almuerzo, aunque habia muchas cosas en la cafeteria que Marisol no podia ni ver, se esforzaba por comer algo nutritivo.

Al salir del edifide oficinas, se detuvo al borde de la carretera cuando un coche estacionado tocé la bocina dos veces hacia ella.

Ella fruncié el cey mird, reconociendo al hombre distinguido que bajaba del asiento del conductor, ligeramente familiar. Después de pensarlo mucho, recordo que era el primo del hombre que tuvo la cita con Gisela...

Recordando la escena desagradable que habia causado Hazel aquel dia, Marisol le pregunto con cautela.

¢No estaras aqui para ajustar cuentas con Gisela, verdad?” 1/3 Chitulo 765 Aloir esto, el hombre suspiro y le dijo. “Mi primo ha estado un poco deprimido Gltimamente, jdicen que incluso ha estado hospitalizado!” “iEntonces realmente vienes a ajustar cuentas?” Marisol se puso en guardia al instante.

Viendo su reaccién, el hombre se apresuro a explicarle. “No, no es eso! Marisol, hoy vine a buscarte”, “iA buscarme?” Marisol se sorprendi6 ain mas.

“iSi!” El hombre asintié y sonrié. “Te diste una buena impresién el otro dia, pero lamentablemente la cena no termino bien. Siempre quise encontrar la oportunidad de volver a verte y supe que trabajabas aqui con Gisela, asi quetla libertad de venir”.

...Marisol de repente tuvo un mal presentimiento.

“Disculpa si te parece inoportuno,” continué el hombre. “mi primo yalo dijo todo, estas soltera en este momento, lo que significa que tienes el derecho de buscar una nueva felicidad. Yo tambiéndivorcié el apasado y puedo entender cémo te sientes. Si no te importa, podriamos empezar como amigos. ; Tienes tiempo para cenar juntos esta noche?” Con cortesia. Marisol le expres6, “Lo siento mucho, pero esta nochetemo que no puedo”.

“Qué tal mafiana por la noche? jMafana vendre a recogerte!”, el hombre no se daba por vencido.

“Lo siento, jmafiana por la noche tampoco puedo!” Marisol negé con la cabeza una vez mas, pensando que esta negativa deberia ser lo suficientemente clara.

Marisol con una expresion de decepcién en su rostro, pensé que él se retractaria, pero en camle extendié una tarjeta de presentacion. “No te preocupes, esta es mi tarjeta con mis datos de contacto. Ahi esta mi numero, puedes agregarme. Si en alglin momento necesitas alguien con quien hablar, aqui estoy. Como estas ocupada estos dias, esperaré hasta que tengas tiempo libre para invitarte de nuevo.” Como si temiera su rechazo, se gird y regresé a su auto.

Sosteniendo la tarjeta, Marisol le dijo: “Oye...” Con la puerta del coche ya cerrada, el vehiculo pasé frente a ella, y a través del cristal de la ventana, le dirigié una sonrisa.

Con un gesto de resignacion y justo cuando iba a retomar su camino, escuché una voz de hombre baja y burlona a su lado, con un tono claramente mordaz, “Después de divorciarte, parece que no te faltan pretendientes, eh, Marisol?” *;Antonio?” ella se sorprendio.

No sabia cuando, pero un Porsche Cayenne negro habia aparecido al lado del camino. Antonio, con un cigarrillo en la mano, salia del asiento del conductor, frunciendo el cecon desden, ‘Si noequivoco, ese fue el que estaba en el restaurante ese dia, el que se fij6 en Gisela, el de las gafas. ;no es asi?” “Si, es su primo,” le confirmé Marisol.

Antoexhalé el humo del cigarrillo, con una mirada vagamente perezosa. “Tu estabas tan decidida a mantener las distancias conmigo, sno era por tu viejo amor Rodrigo? Ahora, ;no te preocupa que él se moleste?” Marisol curvé sus labios en una mueca, “Rodrigo se fue a Australia...” Al escuchar eso, Antose detuvo en seco, sus cejas se fruncieron de inmediato. “;Y ti qué haras? ;Asi de facil te ha dejado plantada?” Marisol, viendo un atisbo de ardor en sus encantadores ojos, sintié un temblor incontrolable en su corazén.

Desvié la mirada de su rostro y le dijo con los labios apretados, “Podemos hablar por telefono o hacer 2/3 Capitulo 765 FaceTime.” Era solo una mentira para enganarlo. Desde la noche en que Rodrigo se despidi6 de ella, no habia habido ni un solo mensaje de texto entre ellos, mucho menos llamadas o FaceTime.

“Ja!” Antose con sarcasmo, dandole una profunda calada a su cigarrillo. Al respirar, sus mandibulas se tensaron visiblemente. “Td aqui y él en el extranjero, y aun asi le permitiste irse. Realmente estas entregada a él, estas dispuesta a una relacion a larga distancia. Cada vezsorprendes més, Marisol. Pero, ;no temes que te traicione una vez mas? ;Acaso eres tonta?” Marisol no pudo replicarle y solo pudo decirle en voz baja, “Antes no tuvo alternativa, de cualquier manera, yo conen él...” Después de escuchar su respuesta, la mirada de Antose oscurecié alin mas.

Al verlo aparecer en la entrada de su canal, Marisol se sintié un poco nerviosa por dentro y, sin darse cuenta.

llevé su mano a su vientre, preguntandole con cautela, “Antonio, ja qué has venido?” Antole contesté con un tono aspero, “iNo he venido a buscarte!” Capitulo 766 Capitulo 766