Receta para robarle el corazón al Dr. Farel

Capítulo 211

Desde fuera del hotel, se escuché una serie de golpes en la puerta, seguidos por una voz conocida que pegaba gritos.

—jOscar, ya estas ganando buena plata, vamos, sal de fiesta y busca unas chicas para pasarla bien, qué haces ahi metido en el hotel!—

Eran esos chicos ricos que lo llamaban.

Oscar, con mucho cuidado, guardé el dinero que tenia en la cama y se acercé a abrir la puerta con una sonrisa apologética en el rostro.

—Mejor vayan ustedes, yo paso, ya saben que tengo esposa y no esta bien que salga a buscar mujeres estando ella embarazada.—

—aY qué si tu esposa esta embarazada? {Qué mas da? Llevas un monton de tiempo sin esa diversion, vas a explotar de las ganas, relajate y disfruta, nosotros no le vamos a decir a tu mujer.—

Uno de los hijos de papa lo miré con desdén.

Pero Oscar sacudié la cabeza y con una sonrisa dijo: —Vayan ustedes, mi esposava a llamar esta noche para ver como estoy y mafiana nos vemos en el casino, ,qué les parece?—

Al escucharlo, los amigos no insistieron mas.

Se fueron con su aire despreocupado y uno exclamé:

—jDéjalo, vamos! Con esa cara de pobre no te pierdes de nada, al final eres un mandilon.— Cuando se fueron, Oscar cerré la puerta con llave.

Volvié a contar el dinero en la habitacién con una sonrisa en el rostro y lo bes6 varias veces.

Ya tenia un plan perfecto, al dia siguiente invertiria esos cien mil en grande, con su habilidad para los juegos y un poco de suerte, jpodria duplicar la cantidad y ganar doscientos mil!

Después, se retiraria y volveria a su pais con una fortuna.

Al dia siguiente.

Oscar se reunié de nuevo con sus amigos ricos en el casino y se sentaron en una mesa para continuar jugando. El gerente del casino ya los conocia y se acercé con una sonrisa para saludarlos.

—Eh, muchachos, gcuanto piensan apostar hoy?—

Oscar, con un aire de confianza, golpe6 la bolsa negra que llevaba y dijo: —jHoy lo apuesto todo!— El gerente le echo una mirada y parecié convencido de su suerte.

—Bien ahi, jque la suerte te acompafie y te hagas rico!—

Oscar se sintié atin mas orgulloso.

Empyjo todas las fichas hacia adelante y con una voz potente dijo: —|Empecemos!—

Cinco minutos después.

Oscar tuvo la mala fortuna de perder una ronda.

Estaba algo molesto y rapidamente comenzé otra.

Y volvié a perder.

Empezo a desesperarse, camtodo su dinero por fichas y siguié jugando una ronda tras otra.

En menos de media hora, su monton de fichas se habia reducido a casi nada.copy right hot pub jLos cien mil que habia ganado durante los Ultimos dias se fueron, capital e intereses incluidos! Oscar se seco el sudor, su rostro se puso palido.

Cuando uno pierde dinero, se desespera.

Penso que era cuestién de mala suerte y que si seguia jugando, su fortuna cambiaria.

Con su habilidad en el juego, jestaba seguro de que recuperaria su dinero!

Oscar buscé en todos sus bolsillos y se cuenta de que no le quedaba dinero, no podia seguir jugando. En ese momento, el gerente del casino se acercé sonriendo y le pregunté a Oscar.

—<¢Qué pasa, amigo? Te quedaste sin dinero, lo perdiste todo?—

Oscar, lleno de remordimiento, Trecupero y gano en grande.—

jo: —No tuve suerte al principio, pero sidejan jugar un par de rondas mas, seguro que

— Ah si? En nuestro casino ofrecemos préstamos, ¢ quieres probar suerte?— dijo el gerente. éExistia tal maravilla?

Los ojos de Oscar se iluminaron, como si viera la primera luz del amanecer.

—jSi, prestadme! Cuando gane, les devolveré todo con intereses.—

—De acuerdo, ven y firma un pagaré conmigo, y te daremos el dinero.—

Oscar se levanté de inmediato y siguié al gerente para recibir el dinero.

Pero el dinero que obtuvo se esfumé en unas pocas rondas, lo perdié todo de nuevo.

No creyendo en su mala racha, siguié pidiendo préstamos y sigui

jugando.

Cuanto mas jugaba, mas perdia, y cuanto mas perdia, mas apostaba.

Al final, con el dinero acumulandose y los intereses creciendo, ya no sabia cuanto debia.

Oscar, con los ojos inyectados en sangre, queria pedir mas, pero esta vez el gerente se nego friamente a prestarle. —Ya debes quinientos mil, si quieres mas dinero, primero tienes que devolver lo que debes.—

éQuinientos mil?

Los ojos de Oscar se abrieron de par en par.

jNo podia creer que en solo unas horas hubiera perdido tanto dinero!

~De donde iba a sacar quinientos mil ahora?

Su bolsillo estaba mas limque su rostro.

—Yo...

no tengo dinero ahora, ,podria daunos dias mas?— Oscar se desesperé, su voz empezo a tartamudear.

— No tienes dinero? Entonces llama a tu familia, busca cémo conseguir el dinero. Si no pagas lo que nos debes, hoy no sales de aqui —

El gerente del casino hizo una sefial y varios guardias de seguridad, altos y corpulentos, se acercaron y rodearon a Oscar. Oscar estaba aterrorizado hasta los huesos. Desesperadamente, se lanzo a suplicar a los otros tres hijos de familias acaudaladas.

—Sefior, gpodria prestaquinientos mil? En cuanto regrese a mi pais, buscaré la manera de devolvérselos— imploraba.

Sin alternativa, Oscar se gird hacia otro de los ricos herederos. —Joven, haria el favor de prestaquinientos mil?—

—Estas sofiando 0 qué? He perdido mas de un millon. Ya noqueda ni un centavo, estoy hasta la coronilla. Aléjate de mi, no estropees mi suerte— replicé el interpelado.

Oscar se quedo sin palabras...

El panico de Oscar crecia por momentos.

Se cuenta de que estaba acorralado.

Con un fuerte sonido, la puerta se cerré tras de él. Oscar miraba a su alrededor, estaba aterrado.

—<¢Qué van a hacer conmigo?— pregunt6 con la voz temblorosa.