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Receta para robarle el corazón al Dr. Farel

Capítulo 408
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Capítulo 408

Farel guardo silenpor un momento y luego le pregunt6: —zEstas herida? —

Margarita asintid rapidamente: duele la pierna, no puedo caminar. —

Farel saco su teléfono de inmediato: —Voy a llamar a la policia por ti. —

Margarita se quedo aténita por unos segundos antes de darse cuenta de lo que él le habia dicho.

No tenia la intencidn de dejarla subir al coche, ni siquiera tocar la puerta del coche.

Se estaba mostrando tan distante como siempre.

Mientras Margarita estaba distraida, Farel ya habia hecho la llamada.

Luego, tomé algunas fotos de ella y de la delantera del coche, y le dijo sin cambiar la expresion de su cara. —Lo siento, pero como chocaste contra mi coche, cualquier problema posterior tendra que ser manejado por el seguro. — El rostro de Margarita se puso alin mas palido.

La estaba tratando de una forma tan fria.

—Dr. Farel, después de todo, somos viejos conocidos, ges necesaser tan meticuloso? —

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—Si no recuerdo mal, el apasado en el hospital tuviste un episopsicdtico y perseguiste a Evrie con un cuchillo, y casi la matas. — La voz de Farel era serena, —Si vamos a hablar de viejos tiempos, Srta. Margarita, deberias también saldar la deuda por el daemocional del apasado, 4no crees? —

Margarita se ahog6 con sus palabras. No esperaba que él le hablara del pasado. Queria defender a Evrie a toda costa.

Ella esbozo una sonrisa sarcastica: —Realmente te preocupas por Evrie, recuerdas hasta el mas minimo agraque ha sufrido. —

—Ya que conoces mis limites, calcula bien si puedes o no permitirte provocarla. —

Justo cuando termin6 de hablar, llego el coche de policia.

Los oficiales bajaron del vehiculo y se dirigieron hacia ellos.copy right hot pub

Farel le repitid lo que habia sucedido y le mostré las grabaciones de la camara del coche. Finalmente, sefialé a Margarita y les dijo a los policias:

—Ella tiene un trastorno mental, tiene estrés postraumatico, y tiene brotes psicoticos de vez en cuando, por favor Ilévenla de vuelta a casa. —

Los oficiales conocian a Farel.

Tras escuchar sus palabras, asintieron y se encargaron rapidamente del asunto. Una vez que Farel termino de explicarles, abrié la puerta del coche y se subid. —¢Resolviste todo? — le preguntdé Evrie.

—Ssi.—

—<¢Qué le pasa a ella? —

—Los policias se encargaran de ella. —

Mientras su coche pasaba de largo, Evrie miré a través de la ventana y sus ojos se encontraron con los de Margarita. Eran unos ojos oscuros, sombrios, frios.

Parecia una psicopata.

Evrie no le aparto la mirada, en camla mird directamente, sin rastro de miedo. Donde se cruzaban las miradas, saltaban chispas.

Si Margarita iba a desafiarla, Evrie no se echaria atras.

El Range Rover se alejé rapidamente.

Margarita se quedo inmovil, mirando la estela del coche, apretando sus dedos. —Sefiorita, te has lastimado la pierna, te llevaremos al hospital. —

Un policia le hablo a su lado.

Margarita bajo la mirada y la sangre que fluia por su pierna, manchando el suelo. Era como si no sintiera el dolor, y les dijo con calma:

—Si, lléveal hospital. —

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Alo largo del camino, Evrie estaba preocupada.

Penso que lidiar con Giselle ya era suficiente.

Y ahora habia aparecido Margarita.

Una misteriosa, la otra loca, ambas necesitaban estar constantemente en guardia. Parecia que tendria que seguir practicando autodefensa, por si acaso.

Farel la observo en silencio, luego la abrazo por detras.

—A partir de mafiana, voy a buscar un guardaespaldas para que te siga. —

Evrie se detuvo por un momento, luego asintié: —Esta bien. —

Farel se suavemente y beso su mejilla.

—Hecho, ti sigue practicando. Yoencargo de los arreglos. —

—jEsta bien!—

Mientras Evrie continuaba con su practica, Farel entré en el estuy cerré la puerta. Su expresion amable se desvaneal instante, tornandose mucho mas fria.

Saco su teléfono y le llamé a Norman Santos.

—Subdirector Norman, controla a tu hija. —

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